Normalmente copio en mi agenda, frases, palabras o retazos que me encuentro a lo largo del día, hoy al abrirla al azar me he encontrado con esto por no casualidad, con permiso de quién sea:
Y si es cierto que has dejado de quererme...
yo te pido por favor que no me lo digas.
Necesito por hoy navegar
inocente en tus mentiras...
Dormiré sonriendo y muy tranquila.
Me despertaré temprano por la mañana.
Y volveré a hacerme a la mar, te lo prometo...
Pero esta vez... sin atisbo de protesta o resistencia
naufragaré por voluntad y sin reservas en la
profundidad inmensa de tu abandono...
Pues mira, es precioso, mucho.
Aunque no me gusta lo que narra.
Prefiero pensar que ese mar está lleno de chapapote y que no es navegable. Así que, nada de prácticas de riesgo.
Las rupturas serenas deberían patentarse... Y así algún japo listo se haría rico.
Atrincherada entre frases enemigas
el olvido ronda las palabras
por descuido negligente y distraido.
Rompe el mar con una ola
de certeras voces en la orilla
que tu piel, se queme
entera con cal viva
sentiras entonces, que eres una.
De las ascuas que te queden
aún ardientes
nunca dejes que terminen
en cenizas.