Ella en las últimas semana le llama todos los días, le sigue contando cómo le ha ido el día y pidiéndole cosas, como si los 20 años que hace que él no trabaja para esa familia no hubieran pasado.
Eso me recuerda que M. también pasó sus últimos momentos viajando en tren y jugando a las cartas, sin salir de su cama.
Cuando yo pierda totalmente la cabeza espero revivir mis buenos tiempos de Empire o llamar para una cena de la amistad o volver a ver que llevas mi maleta, y morir, en los mejores momentos.
Joer... pues creo que para que las últimas neuronas que nos quedan dejen de tirar del resto no queda mucho... ay mi madre... que no me de por ponerme plataformas ni corpiños...
Posted by: grache on 12 de Junio 2008 a las 01:03 PMEstamos hechos de recuerdos, y tal vez cuando se pierde la cabeza, solo nos quedan los que más apreciamos.
Posted by: Lluís on 18 de Junio 2008 a las 09:49 PM
En ese momento sonara el telefono y organizaremos una cena de la amistad...aunque no sea martes.