18 de Abril 2008

Alto y rubio como la cerveza

El otro día la Chuly y servidora fuimos de compras, después del desgaste de este deporte nacional femenino decidimos recuperar fuerzas en una heladería del centro comercial, desde nuestra situación divisamos un mega-gimnasio-piscina-spa-etc…
Le comenté a la Chuly que me habían filtrado la información de que Darek cultivaba su imagen allí, y a la Chuly que está abriéndose fronteras al mercado del Este le despertó un interés desmesurado, de hecho me hizo entrar a ver las instalaciones.

Nos indicaron que no quedaba ningún comercial libre y que esperáramos, así que nos acercamos a ver desde la cristalera la piscina, inmersa mi mirada en el azul, me volvió al mundo un ¡¡Mírale!! ¡¡Es él!! Dirigí mi mirada hacia donde miraba la Chuly y como veo menos que un gato de escayola solo alcancé a ver a dos tipos entrando al vestuario, le dije que no alucinara y en ese momento un comercial nos invitó a sentarnos en su mesa.

darek.jpg


Mientras el comercial nos soltaba su discurso, pasaban por detrás unos chicos, la Chuly los miró sin disimulo alguno y me empezó a dar patadas por debajo de la mesa, llegadas a este punto, el comercial ya solo me intentaba vender la moto a mi y cuando yo le pedía con la mirada a la Chuly que se comportará, ella, después de decirle al comercial que no estaba acostumbrada a ese tipo de instalaciones le preguntó si Darek era socio, yo soñé con ser avestruz para meter la cabeza en el suelo, y le devolví las pataditas por debajo de la mesa, obviamente el comercial nos dio carril en seguida.

A la salida, había una demostración de spining y nos entretuvimos un rato criticando (otro deporte nacional) a las monitoras, y que suerte la nuestra cuando nos damos cuenta de que salía del gimnasio Darek, iba con gorra y acompañado de otro varón con las dimensiones de mi armario empotrado, cual adolescentes fuimos detrás de ellos, bajando las escaleras mecánicas la gente le reconocía y le retrataban con sus móviles, mientras la Chuly se agazapaba detrás de mi en un repentino ataque de timidez y el armario empotrado nos miraba como diciendo que no teníamos edad para ir de fans persecutorias.

Llegar hasta el parking me pareció suficiente para colmar mi sensible sentido de la ridiculez, y para de decirles que es un super pivón, pero tanto, que resulta antinatural, un Ken.

Por cierto, no se duchó en el gimnasio…

Posted by Srta.Vainilla at 18 de Abril 2008 a las 12:41 PM
Comments

Pues claro que está como un queso de cabra, pero amiga, eso de perseguir a la gente es muy del tomate, o del muchacho gafotas ese, pero, a vuestra edad....
Por cierto, estoy pensando que quizás el muchacho no es un gorrino, sino que en la ducha puede que también cause el mismo efecto de persecución por sus admiradores, y el hombre estará hasta la gorra de fotos con móviles... imagínate en la ducha.

Posted by: grache on 18 de Abril 2008 a las 04:48 PM

Me alegro de tu "vuelta", los gimnasios ¿son esos sitios que estan cerca de los bares y de donde sale gente que se deben de llevar todo lo que hay dentro en grandes bolsas?..... una vez vi uno por dentro.

saludos

Posted by: Chuchu on 21 de Abril 2008 a las 12:28 PM
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